A lo largo de
las publicaciones del blog, hemos visto los riesgos y peligros existente en los
distintos lugares dentro del hogar, como lo son las piezas, living, comedor,
cocina, baño incluso el patio y el vehículo. Pudimos conocer los riesgos de
cada lugar y conocer algunas medidas que tomar.
En esta
oportunidad veremos las consecuencias de no actuar responsablemente, es decir,
los tipos de heridas, golpes, quemaduras estas se clasifican de esta manera:
HERIDAS PUNZANTES: este tipo de
heridas son originadas por elementos puntiagudos como agujas, anzuelos, etc.
Existe la posibilidad de que el corte ocasiones hemorragias internas o dañe las
cavidades subyacentes. Por otro lado, se corre el riesgo de infección.
HERIDAS CORTANTES: son producidas por
objetos filosos tales como vidrios o cuchillos. A pesar de ocasionar una
hemorragia escasa, puede llegar a poner en riesgo musculaciones, nervios y
tendones.
ABRASIONES: la palabra abrasión se
refiere básicamente a raspaduras, provocadas por la fricción de la piel con una
determinada superficie. Aunque se considera una herida superficial, se debe
tener en consideración la posibilidad de infección. De todos modos, suelen
curarse de forma acelerada.
LACERACIONES: se refiere a una
abertura en la piel y/o un desgarro en los tejidos. Son efectuadas por
elementos de bordes serrados. Superficialmente son irregulares. De acuerdo al
tamaño las laceraciones pueden ser menores o requerir alguna intervención
médica.
MAGULLADURAS: son lesiones cerradas
causadas por un golpe. No presentan heridas exteriores, sino que se distinguen
como una mancha en tono morado.
CONTUSIONES: se ocasiona debido a la
resistencia ejercida por los huesos frente a un golpe. La herida presenta
bordes irregulares, y tiende a la formación de una cicatriz en la piel. Además,
las contusiones suelen producir una hemorragia en los tejidos internos.
QUEMADURAS DE PRIMER GRADO: son
superficiales, es decir que se limitan a lesionar la epidermis. En la zona de
la herida se puede observar una pequeña hinchazón, y enrojecimiento. Además el
individuo quemado experimenta dolor al tacto.
QUEMADURAS DE SEGUNDO GRADO: Éstas no
sólo afectan a la epidermis, sino que la segunda capa de la piel (dermis)
también es dañada. Los signos observados en la zona quemada suelen ser:
hinchazón, pérdida de la piel y formación de ampollas de agua.
QUEMADURAS DE TERCER GRADO: aquí,
además de afectar la epidermis y la dermis, se comprometen los tejidos
internos, los músculos y tendones. La región herida no presenta sensibilidad a
causa de la destrucción de los nervios. Asimismo, la probabilidad de
regeneración es mínima. Las quemaduras de tercer grado suelen ser ocasionadas
por el contacto con fuego, superficies y líquidos calientes.
HERIDAS
ABIERTAS: En este tipo de heridas se observa la separación de los tejidos
blandos. Este tipo de herida tiende a infectarse fácilmente.
HERIDAS CERRADAS: Son aquellas en las que aparentemente no hay lesión, sin
embargo, la hemorragia se acumula debajo de la piel, en cavidades o viseras.
Aunque, aparentemente no ha sucedido nada, las lesiones internas pueden ser de
gravedad.
Este tipo de lesiones deben ser tratadas por un médico inmediatamente.
HERIDAS SIMPLES: Son heridas que afectan la piel, sin ocasionar daño en órganos
importantes como: rasguños, heridas pequeñas, arañazos.
HERIDAS COMPLICADAS: Son heridas extensas y profundas con hemorragia abundante;
generalmente hay lesiones en músculos, tendones, nervios, vasos sanguíneos,
órganos internos y puede o no existir perforación visceral.
CASOS CON HERIDAS ESPECIALES :
Existen casos especiales de heridas como: Neumotórax abierto o herida
perforante en el tórax: es la presencia de aire en la cavidad pleural,
producida por la entrada de aire desde el exterior (herida torácica), y provoca
un dolor intenso y dificultad respiratoria.
Heridas perforantes en abdomen
Las complicaciones más frecuentes de estas heridas son:
Hemorragia interna: prevenir el choque hipovolémico.
Perforación del tubo digestivo.
Salida de asas intestinales.
AMPUTACIONES TRAUMATICAS : Se denomina amputación traumática a la pérdida
de algún miembro, o parte de él, como consecuencia de un traumatismo. En estos
casos suele actuar un acto reflejo de constricción de los vasos sanguíneos
producido por la depresión, retrasando que la persona muera desangrada (aunque
existe inevitablemente abundante pérdida de sangre).
Fuente: [Información de Enciclopedia de
tipos], Tipos de heridas (2016), Recuperado de:
[Información de Salud Galeón], (Clasificación de
heridas (Sin Fecha), Recuperado de:
http://salud09002623.galeon.com/productos2108004.html